Esposas e hijas de trabajadores por la dignidad laboral
Guadalupe Cruz Jaimes
CIMAC
México DF, 3 feb.10
A dos años y medio de que más de mil mineros de Cananea, Sonora, Taxco, Guerrero, y Sombrerete, Zacatecas, estallaron en huelga para buscar mejores condiciones de trabajo, sus esposas e hijas conformaron ayer el Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores de México.
Lideradas por María Rosa Guayante García, esposa de un minero del cobre de Cananea, cientos de mujeres iniciaron esta acción que tiene como fin defender los derechos laborales de las y los trabajadores del país, no sólo de los mineros, por lo que convocan a mujeres de distintos movimientos sindicales y sociales a “unir fuerzas” en este Frente, que tendrá la figura jurídica de Asociación Civil.
Así lo refirió a Cimacnoticias Guayante García, presidenta de Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores de México, conformado ayer en la Ciudad de México, quien añadió que las trabajadoras de Luz y Fuerza del Centro, afiliadas al Sindicato Mexicano de Electricistas, se unirán a las acciones de protesta que realizarán las esposas e hijas de los mineros.
Los trabajadores de las secciones 65, 17 y 201 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSRM) permanecen en huelga desde el 30 de julio de 2007, fecha en que izaron las banderas rojinegras en sus centros de trabajo para exigir a Grupo México mejorar las condiciones de seguridad e higiene y una revisión contractual.
Las huelgas de Taxco y Sombrerete siguen sin resolverse, pero en el caso de Cananea, Grupo México, propiedad de Germán Larrea Mota Velasco, desconoció la huelga “en contubernio con Felipe Calderón” titular del ejecutivo, mediante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje dio por terminada la relación laboral, en abril de 2009.
Ante este hecho, los mineros cananenses interpusieron un recurso de amparo ante el Segundo Tribunal Colegiado del primer circuito en materia del trabajo, laudo que todavía no ha sido resuelto.
El pasado 26 de enero, Grupo México ofreció a los trabajadores de Cananea una liquidación que en promedio asciende a 170 mil pesos.
MUJERES CANANENSES EN LUCHA
Ante la oferta de Grupo México, “estamos en pie de lucha, dispuestas a salir a tocar puertas para que nuestros esposos no se liquiden”, sostiene María Rosa Guayante, quien ayer en asamblea general fue nombrada presidenta del Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores en México.
Al tiempo, frente a la amenaza de dicha empresa para desalojar a los mineros que custodian las entradas de su centro de trabajo, las cananenses manifestaron en la asamblea que no darán un paso atrás: “esta lucha apenas comienza y vamos por todo”, señaló María del Socorro Ramos Hernández, viuda del minero Juventino Flores Salas, asesinado en Fresnillo, Zacatecas, el 10 de junio de 2009.
“Juntas vamos a hacer historia, en la defensa de los mineros, de los electricistas, de todas y todos los trabajadores del país”, expresó Ana Sánchez Valladares, de Taxco, Guerrero, en solidaridad con las esposas de los trabajadores del cobre, de Cananea.
Las cananenses, a diferencia de las esposas de los mineros de las secciones 17 y 201 del SNMMSRM, en Taxco y Sombrerete, respectivamente, tienen un referente histórico de lucha y organización, que inició en 1989, y que se volvió a conformar el 14 de enero de 2008.
Durante la huelga que estallaron los mineros de Cananea el 28 de agosto de 1989, la cual terminó en octubre de ese mismo año, las esposas de los trabajadores conformaron el Frente de Solidaridad Femenil Cananenses.
Dicho Frente “nació de las inquietudes de unas compañeras esposas de mineros, ante la terrible situación por la que estaba atravesando la comunidad, querían contribuir de alguna manera a darle una inyección de ánimo a sus esposos”, refiere el documento “Las mujeres de Cananea se organizan”, firmado por el Comité Coordinador de esta organización de mujeres en apoyo de la Sección 65.
A ellas, se sumaron maestras y trabajadoras de la región, quienes participaron en el cierre de carreteras, huelgas de hambre, la toma del periódico La Voz del Norte, y en encuentros nacionales de solidaridad con la huelga de Cananea.
En estas tierras, donde el invierno es duro, tanto como las condiciones en las que se han visto obligados a trabajar miles de mineros, desde la explotación de las minas de cobre, la cual data de principios del siglo pasado, el 14 de enero de 2008, las esposas de los trabajadores se volvieron a organizar.
A raíz del 11 de enero de ese año, cuando policías federales, estatales y municipales desalojaron a los huelguistas de la mina, “nosotras salimos a luchar de lado de ellos y fue cuando se decidió formar el Frente Femenil Cananense”.
Desde hace más de dos años, las cananenses caminan a la par de sus compañeros de vida, en defensa del Contrato Colectivo de Trabajo de sus cónyuges, porque éste representa “el patrimonio que les vamos a dejar a nuestros hijos”, señaló María Rosa Guayante.
Por ello, recalcó: “queremos que el Frente crezca, que cada vez seamos más las mujeres, que desde distintas luchas, alcemos la voz para denunciar las injusticias que comete el gobierno mexicano en contubernio con los empresarios, como es el caso de Grupo México”.
09/GCJ/LR/LGL
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Guadalupe Cruz Jaimes
CIMAC
México DF, 3 feb.10
A dos años y medio de que más de mil mineros de Cananea, Sonora, Taxco, Guerrero, y Sombrerete, Zacatecas, estallaron en huelga para buscar mejores condiciones de trabajo, sus esposas e hijas conformaron ayer el Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores de México.
Lideradas por María Rosa Guayante García, esposa de un minero del cobre de Cananea, cientos de mujeres iniciaron esta acción que tiene como fin defender los derechos laborales de las y los trabajadores del país, no sólo de los mineros, por lo que convocan a mujeres de distintos movimientos sindicales y sociales a “unir fuerzas” en este Frente, que tendrá la figura jurídica de Asociación Civil.
Así lo refirió a Cimacnoticias Guayante García, presidenta de Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores de México, conformado ayer en la Ciudad de México, quien añadió que las trabajadoras de Luz y Fuerza del Centro, afiliadas al Sindicato Mexicano de Electricistas, se unirán a las acciones de protesta que realizarán las esposas e hijas de los mineros.
Los trabajadores de las secciones 65, 17 y 201 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSRM) permanecen en huelga desde el 30 de julio de 2007, fecha en que izaron las banderas rojinegras en sus centros de trabajo para exigir a Grupo México mejorar las condiciones de seguridad e higiene y una revisión contractual.
Las huelgas de Taxco y Sombrerete siguen sin resolverse, pero en el caso de Cananea, Grupo México, propiedad de Germán Larrea Mota Velasco, desconoció la huelga “en contubernio con Felipe Calderón” titular del ejecutivo, mediante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje dio por terminada la relación laboral, en abril de 2009.
Ante este hecho, los mineros cananenses interpusieron un recurso de amparo ante el Segundo Tribunal Colegiado del primer circuito en materia del trabajo, laudo que todavía no ha sido resuelto.
El pasado 26 de enero, Grupo México ofreció a los trabajadores de Cananea una liquidación que en promedio asciende a 170 mil pesos.
MUJERES CANANENSES EN LUCHA
Ante la oferta de Grupo México, “estamos en pie de lucha, dispuestas a salir a tocar puertas para que nuestros esposos no se liquiden”, sostiene María Rosa Guayante, quien ayer en asamblea general fue nombrada presidenta del Frente nacional de mujeres en lucha por la dignidad de los trabajadores en México.
Al tiempo, frente a la amenaza de dicha empresa para desalojar a los mineros que custodian las entradas de su centro de trabajo, las cananenses manifestaron en la asamblea que no darán un paso atrás: “esta lucha apenas comienza y vamos por todo”, señaló María del Socorro Ramos Hernández, viuda del minero Juventino Flores Salas, asesinado en Fresnillo, Zacatecas, el 10 de junio de 2009.
“Juntas vamos a hacer historia, en la defensa de los mineros, de los electricistas, de todas y todos los trabajadores del país”, expresó Ana Sánchez Valladares, de Taxco, Guerrero, en solidaridad con las esposas de los trabajadores del cobre, de Cananea.
Las cananenses, a diferencia de las esposas de los mineros de las secciones 17 y 201 del SNMMSRM, en Taxco y Sombrerete, respectivamente, tienen un referente histórico de lucha y organización, que inició en 1989, y que se volvió a conformar el 14 de enero de 2008.
Durante la huelga que estallaron los mineros de Cananea el 28 de agosto de 1989, la cual terminó en octubre de ese mismo año, las esposas de los trabajadores conformaron el Frente de Solidaridad Femenil Cananenses.
Dicho Frente “nació de las inquietudes de unas compañeras esposas de mineros, ante la terrible situación por la que estaba atravesando la comunidad, querían contribuir de alguna manera a darle una inyección de ánimo a sus esposos”, refiere el documento “Las mujeres de Cananea se organizan”, firmado por el Comité Coordinador de esta organización de mujeres en apoyo de la Sección 65.
A ellas, se sumaron maestras y trabajadoras de la región, quienes participaron en el cierre de carreteras, huelgas de hambre, la toma del periódico La Voz del Norte, y en encuentros nacionales de solidaridad con la huelga de Cananea.
En estas tierras, donde el invierno es duro, tanto como las condiciones en las que se han visto obligados a trabajar miles de mineros, desde la explotación de las minas de cobre, la cual data de principios del siglo pasado, el 14 de enero de 2008, las esposas de los trabajadores se volvieron a organizar.
A raíz del 11 de enero de ese año, cuando policías federales, estatales y municipales desalojaron a los huelguistas de la mina, “nosotras salimos a luchar de lado de ellos y fue cuando se decidió formar el Frente Femenil Cananense”.
Desde hace más de dos años, las cananenses caminan a la par de sus compañeros de vida, en defensa del Contrato Colectivo de Trabajo de sus cónyuges, porque éste representa “el patrimonio que les vamos a dejar a nuestros hijos”, señaló María Rosa Guayante.
Por ello, recalcó: “queremos que el Frente crezca, que cada vez seamos más las mujeres, que desde distintas luchas, alcemos la voz para denunciar las injusticias que comete el gobierno mexicano en contubernio con los empresarios, como es el caso de Grupo México”.
09/GCJ/LR/LGL
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