La Crónica de HOy
10 de Octubre, 2010
En noviembre próximo se cumplirá un año de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tomó en sus manos el dominio total de abasto y distribución de energía eléctrica en el país, pues después del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LyFC), sumó a su área de influencia la zona centro de la República Mexicana. En Hidalgo, son constantes las quejas a lo largo de este tiempo, ya sea por los frecuentes y prolongados apagones registrados durante la primera mitad del año, o por el cobro excesivo a particulares y empresas. Así, la CFE trata de abarcar todas las funciones que ahora le tocan cumplir, mientras que la población sigue pendiente de que en efecto ocurra, pues las pérdidas económicas, según reporta la propia ciudadanía, van desde algunas mínimas hasta otras que alcanzan los seis ceros.
Entre apagones y pérdidas millonarias. En este sentido el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) Pachuca, Miguel Estrada Méndez, señaló que los primeros meses de 2010 fueron muy complicados. En promedio, las pérdidas por cortes al suministro eléctrico ascendieron a los 60 millones de pesos. En las semanas recientes las fallas disminuyeron y no existen reportes de afectaciones.
Estrada Méndez expuso que recibió noticias de los empresarios acerca de que la CFE ha tomado acciones personalizadas con algunos de ellos para sugerirles actividades preventivas. Sin embargo, aclaró que aunque el abasto mejoró, hay todavía un grave problema entre pequeños y medianos empresarios, pues entre las medidas de prevención están el contar con una fuente de energía propia, pero no poseen los recursos para ello.
En tanto que Canacintra Pachuca buscará un acercamiento con las autoridades de nivel central de la CFE para que hagan algo respecto de las pérdidas económicas que sufrieron a lo largo del año, por lo que Estrada Méndez convocó a sus asociados para llevar evidencia a sus oficinas y así plantear una reparación del daño, con pruebas.
Según información que envía usualmente la empresa paraestatal, atiende a los distintos municipios de la entidad que se quedan sin energía, ya sea por las condiciones climatológicas, por el daño a algún transformador o, en algunos casos, incluso por situaciones presuntamente provocadas para hacer daño a las líneas de distribución.
Cobros excesivos alcanzan a usuarios particulares y empresas. Aunque la situación de los apagones logró un considerable decremento, todavía hay muchas cosas por hacer. En este orden de ideas, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Hidalgo, Eleazar García Sánchez, señaló que la CFE recupera terreno en cuestión de caída de energía, pues lo está controlando más, pero hay una inconformidad generalizada respecto a las tarifas, pues están muy por encima del promedio que anteriormente pagaban las industrias y comercios ante LyFC.
Por ello, refirió, se pretende que la compañía asesore a los empresarios para saber de qué manera se están calculando las tarifas, que por otra parte deben ser acordes al promedio que se venía manejando en los años anteriores. Y es que hay quienes pagan hasta dos o tres veces más que antes sin tener cambios considerables en maquinaria o ampliaciones en sus requerimientos para operar.
Bajo estas circunstancias, aproximadamente 70 por ciento de los integrantes del organismo empresarial se han quejado de los aumentos en el costo real del servicio de energía, lo que afecta de igual forma sus precios, porque cuentan con un presupuesto anual y a raíz de esta situación los presupuestos tuvieron que ser alterados. Como consecuencia, a final del año habrá que reprogramar las cosas para el siguiente.
Qué dice Profeco ante la responsabilidad. Frente a este panorama, la delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Hidalgo, Sonia Leslie del Villar Sosa, señaló que de agosto a la fecha incrementaron las protestas en contra de la CFE, pues los quejosos afirman que los cobros resultan muy elevados, y semanalmente llegan a sus manos decenas de comentarios en el mismo sentido.
No obstante, puntualizó que dichas situaciones se atienden por parte de la empresa, ya que tiene la obligación de diferir el cobro en los siguientes meses de servicio, sobre todo cuando este fue excesivo en su aplicación. Por ello, la funcionaria alentó a quienes padecen de esta situación para que acudan ante la procuraduría y puedan resolver esta problemática.
En tanto, la CFE dispuso los llamados “cajeros CFEmáticos” para realizar los pagos correspondientes de recibos de luz. Cabe recordar que a través de estos modernos sistemas se puede encontrar información como requisitos de contratación, lugares dónde pagar, asesoría para el ahorro de energía, entre otros. Además se tienen al alcance líneas telefónicas con enlace permanente al 071 para reporte de fallas, contratación de servicios e información en general.
Dentro de las medidas paliativas para mejorar la atención a los usuarios, la División Centro Oriente implementa tecnología de vanguardia enfocada al cliente por medio de los Centros de Atención ubicados en municipios como Pachuca, Tula, Tulancingo y Tlaxcoapan, entre otros, donde se brinda servicio e información directa. Así como algunas líneas telefónicas para solicitar atención en caso de alguna contingencia.
En espera de nuevas subestaciones. Uno de las inconvenientes del abasto de energía es la carencia de subestaciones eléctricas, que desde que estaban a cargo de LyFC era una solicitud constante e incluso prometida para mejorar las condiciones de la población. Bajo estas condiciones, en los primeros meses del año, quien fuera gerente de la zona de distribución centro oriente, Mario Morales Vielmas, estableció la necesidad de contar con infraestructura que inicialmente costaría 100 millones de pesos y se desarrollaría durante dos años.
Dichos recursos se aplicarían para crear subestaciones, reforzamiento de redes y líneas, cambio de voltaje y automatización de equipos para aislar las fallas en el abasto de forma inmediata. Inicialmente, el gerente planteó la necesidad de que comenzara la construcción de una nueva subestación de 400 mil volts de potencia en Pachuca, lo que ayudaría a mejorar el servicio.
Hoy en día, la expectativa es que estas metas se alcancen verdaderamente, por lo que la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), a través de su presidente Edgar Espínola Licona, levantó la mano para que los empresarios hidalguenses sean tomados en cuenta en caso de dar inicio formal a este tipo de obras.
El representante de los constructores señaló que, a decir de autoridades de la CFE, hoy en día el nivel de capacidad para generar energía es suficiente, pero la complicación es la distribución, de ahí la necesidad de hacer algo ya para mejorar las condiciones del servicio.
Fuente
10 de Octubre, 2010
En noviembre próximo se cumplirá un año de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tomó en sus manos el dominio total de abasto y distribución de energía eléctrica en el país, pues después del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LyFC), sumó a su área de influencia la zona centro de la República Mexicana. En Hidalgo, son constantes las quejas a lo largo de este tiempo, ya sea por los frecuentes y prolongados apagones registrados durante la primera mitad del año, o por el cobro excesivo a particulares y empresas. Así, la CFE trata de abarcar todas las funciones que ahora le tocan cumplir, mientras que la población sigue pendiente de que en efecto ocurra, pues las pérdidas económicas, según reporta la propia ciudadanía, van desde algunas mínimas hasta otras que alcanzan los seis ceros.
Entre apagones y pérdidas millonarias. En este sentido el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) Pachuca, Miguel Estrada Méndez, señaló que los primeros meses de 2010 fueron muy complicados. En promedio, las pérdidas por cortes al suministro eléctrico ascendieron a los 60 millones de pesos. En las semanas recientes las fallas disminuyeron y no existen reportes de afectaciones.
Estrada Méndez expuso que recibió noticias de los empresarios acerca de que la CFE ha tomado acciones personalizadas con algunos de ellos para sugerirles actividades preventivas. Sin embargo, aclaró que aunque el abasto mejoró, hay todavía un grave problema entre pequeños y medianos empresarios, pues entre las medidas de prevención están el contar con una fuente de energía propia, pero no poseen los recursos para ello.
En tanto que Canacintra Pachuca buscará un acercamiento con las autoridades de nivel central de la CFE para que hagan algo respecto de las pérdidas económicas que sufrieron a lo largo del año, por lo que Estrada Méndez convocó a sus asociados para llevar evidencia a sus oficinas y así plantear una reparación del daño, con pruebas.
Según información que envía usualmente la empresa paraestatal, atiende a los distintos municipios de la entidad que se quedan sin energía, ya sea por las condiciones climatológicas, por el daño a algún transformador o, en algunos casos, incluso por situaciones presuntamente provocadas para hacer daño a las líneas de distribución.
Cobros excesivos alcanzan a usuarios particulares y empresas. Aunque la situación de los apagones logró un considerable decremento, todavía hay muchas cosas por hacer. En este orden de ideas, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Hidalgo, Eleazar García Sánchez, señaló que la CFE recupera terreno en cuestión de caída de energía, pues lo está controlando más, pero hay una inconformidad generalizada respecto a las tarifas, pues están muy por encima del promedio que anteriormente pagaban las industrias y comercios ante LyFC.
Por ello, refirió, se pretende que la compañía asesore a los empresarios para saber de qué manera se están calculando las tarifas, que por otra parte deben ser acordes al promedio que se venía manejando en los años anteriores. Y es que hay quienes pagan hasta dos o tres veces más que antes sin tener cambios considerables en maquinaria o ampliaciones en sus requerimientos para operar.
Bajo estas circunstancias, aproximadamente 70 por ciento de los integrantes del organismo empresarial se han quejado de los aumentos en el costo real del servicio de energía, lo que afecta de igual forma sus precios, porque cuentan con un presupuesto anual y a raíz de esta situación los presupuestos tuvieron que ser alterados. Como consecuencia, a final del año habrá que reprogramar las cosas para el siguiente.
Qué dice Profeco ante la responsabilidad. Frente a este panorama, la delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Hidalgo, Sonia Leslie del Villar Sosa, señaló que de agosto a la fecha incrementaron las protestas en contra de la CFE, pues los quejosos afirman que los cobros resultan muy elevados, y semanalmente llegan a sus manos decenas de comentarios en el mismo sentido.
No obstante, puntualizó que dichas situaciones se atienden por parte de la empresa, ya que tiene la obligación de diferir el cobro en los siguientes meses de servicio, sobre todo cuando este fue excesivo en su aplicación. Por ello, la funcionaria alentó a quienes padecen de esta situación para que acudan ante la procuraduría y puedan resolver esta problemática.
En tanto, la CFE dispuso los llamados “cajeros CFEmáticos” para realizar los pagos correspondientes de recibos de luz. Cabe recordar que a través de estos modernos sistemas se puede encontrar información como requisitos de contratación, lugares dónde pagar, asesoría para el ahorro de energía, entre otros. Además se tienen al alcance líneas telefónicas con enlace permanente al 071 para reporte de fallas, contratación de servicios e información en general.
Dentro de las medidas paliativas para mejorar la atención a los usuarios, la División Centro Oriente implementa tecnología de vanguardia enfocada al cliente por medio de los Centros de Atención ubicados en municipios como Pachuca, Tula, Tulancingo y Tlaxcoapan, entre otros, donde se brinda servicio e información directa. Así como algunas líneas telefónicas para solicitar atención en caso de alguna contingencia.
En espera de nuevas subestaciones. Uno de las inconvenientes del abasto de energía es la carencia de subestaciones eléctricas, que desde que estaban a cargo de LyFC era una solicitud constante e incluso prometida para mejorar las condiciones de la población. Bajo estas condiciones, en los primeros meses del año, quien fuera gerente de la zona de distribución centro oriente, Mario Morales Vielmas, estableció la necesidad de contar con infraestructura que inicialmente costaría 100 millones de pesos y se desarrollaría durante dos años.
Dichos recursos se aplicarían para crear subestaciones, reforzamiento de redes y líneas, cambio de voltaje y automatización de equipos para aislar las fallas en el abasto de forma inmediata. Inicialmente, el gerente planteó la necesidad de que comenzara la construcción de una nueva subestación de 400 mil volts de potencia en Pachuca, lo que ayudaría a mejorar el servicio.
Hoy en día, la expectativa es que estas metas se alcancen verdaderamente, por lo que la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), a través de su presidente Edgar Espínola Licona, levantó la mano para que los empresarios hidalguenses sean tomados en cuenta en caso de dar inicio formal a este tipo de obras.
El representante de los constructores señaló que, a decir de autoridades de la CFE, hoy en día el nivel de capacidad para generar energía es suficiente, pero la complicación es la distribución, de ahí la necesidad de hacer algo ya para mejorar las condiciones del servicio.
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